De padres a hijos

¿ No son siempre las mejores cosas las que se pasan de padres a hijos ?

Al menos eso nos dicen las películas, libros y todas las historias en las que, como humanos, nos solemos fijar y que tanto éxito tienen. En la mayoría de los casos, suelen basarse en ficción. Es una receta sencilla. Nos gusta que las historias sean entretenidas y tengan buen final. Vivir feliz y comer perdiz. ¿No?

En 1978

Mi padre empezó una historia que no va a acabar aquí, sino que, con dedicación, espero poder llevar adelante por muchos años del mismo modo que lo ha hecho y sigue haciendo él. Una historia real. 

 Grantlamp mantiene su ADN y el espíritu de cuando un día decidió satisfacer las necesidades de un cliente exigente. Un producto fuera de todo catálogo. Desde entonces, tenemos la puerta abierta a quien quiera trabajar un proyecto de iluminación decorativa de la más alta calidad.

No sabemos si comeremos perdices, pero al trabajar haciendo lo que más nos gusta, vivimos felices.